domingo, 21 de enero de 2007

EL CEFALÓFORO

Faltan cinco minutos para que comience la misa de 11. Me cuelo en la iglesia de la Encarnación. 2 tercios del templo repletos, mayormente, de feligresas que departen animadamente. Hay un grupo de media docena de niños. Me miran, curiosos, pero sin descaro, un vistazo amable ante un extraño que cámara en ristre mira las paredes en busca de un santo sin cabeza. Ahí está. El segundo por la izquierda. Es una escultura casi de tamaño natural se encuentra bien conservada. Tiro 5 fotos. Sonrío a las damas y salgo. Largas hileras de nubes blancas jalonan el cielo. Ya tengo todos los elementos para contar la historia del cefalóforo.



Consejos para leer este relato: ... De Cómo San Dionisio perdió su cabeza...
1.- Cerrad puertas y ventanas. Sumergíos en la oscuridad.
2.- Situad en vuetsros reproductor de CD música tétrica con cierto toque espiritual
"Y entonces tomó su cabeza entre las manos y se dirigió con ella bajo el brazo hasta el lugar donde habría de recibir sepultura. Durante este camino hacia el sepulcro no paró de hablar. Divinas frases, palabras que desprendían un leve aroma de rosas y que hacían referencia a la Santísima Trinidad. Su cráneo está guardado en el monasterio Búlgaro Doquiario en el monte Atos".


Ya está. La historia de los santorales no hace más referencias a lo tétrico del asunto. Así que dejemos la puesta en escena teatral y vaya aquí un pelín de historia.
"Este santo es el que se menciona en Los Hechos de los Apóstoles junto con Damarás su esposa. Se convirtió a la Fe en nuestro Señor Jesucristo por las manos del Apóstol Pablo durante su visita a Atenas. Dionisio era uno de los consejeros de la suprema corte de justicia, llamada comité de Areópago y conocedor de la filosofía griega. Se dice que en el día de la crucifixión del Señor en Jerusalén, Dionisio vio un eclipse solar que rompía las reglas de la astronomía reconocida en aquel entonces, luego dijo: “O Dios está dolorido o es que ha llegado el fin del mundo”. Cuando San Pablo pasó por este centro cultural de Atenas, el Areópago, dijo su famosa homilía: “Atenienses, veo que vosotros sois, por todos los conceptos, los más respetuosos de la Divinidad. Pues al pasar y contemplar vuestros monumentos sagrados, he encontrado también un altar en el que estaba grabado esta inscripción: ‘Al Dios desconocido.’ Pues bien, lo que adoráis sin conocer, eso os vengo yo a anunciar...” (Hch. 17, 22-31) y les predicó al Dios verdadero, aunque muchos empezaron a burlarse de Pablo y de su prédica, otros pocos se adhirieron a él y creyeron; entre ellos estaba Dionisio.
La Tradición nos dice que Dionisio fue el primer obispo de Atenas. También se menciona de él que en la Dormición de la Santísima Madre de Dios, se presentó en el Espíritu Santo. Vivió noventa años y fue decapitado durante la persecución del Emperador Domiciano (96 d.C.). Su cráneo está guardado en el monasterio Búlgaro Doquiario en el monte Atos" .



...Y esta es la historia del cefalórofo...

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Ayyyy y encima me he dado cuenta de que soy la entrada núemro 666

!!!!!!!!!

Anónimo dijo...

La foto de Ojén nevado que vi yo en una web y que a una marbellera le hacía gracia puede que se haga realidad el viernes 26.Nieve a 400 metros.No me perdería esa foto ni por nada del mundo.Barakaldo.SanBizenteko jaiak.

Anónimo dijo...

el sol es la vitamina de los pobres.