miércoles, 20 de junio de 2007

OJÉN: SEDE DE GOBIERNO

La primera vez que lo vi no di crédito a mis ojos. Fue como un fogonazo, un reflejo inconsciente o una fácil asociación de ideas. No porque no me lo creyera, o no tuviera fe, si no porque estaba convencido de que la vista había jugado un espejismo que confundía la realidad con la política ficción. Nada que ver con Saúl, su viaje, la caída del caballo y la parafernalia religiosa teologal cristiana, había visto mal en esta especie de caleidoscopio que se forma entre la luz del sol y las sombras de los alares. Seguro. La segunda vez presté mayor atención y no me dejé manejar por supercherías, ni por adivinanzas mentales. Allí estaba, sita en una de las curvas de la carretera, en la calle de la villa que lleva el mismo nombre, en un recodo justo a la derecha si vienes y justo a la izquierda si vas. Muy próxima a la entrada de las Cuevas Bajas. Una casa, tres pisos si se cuenta el bajo. Estrecha, sin lujos ni alharacas. Sencilla y con un pátina que la deja a medio terminar. Allí están las nueve letras, dos correspondientes al artículo determinado y otras siete al nombre propio: LA MONCLOA. Es verídico, no una anécdota falaz ni una licencia poética. Hasta ahora Ojén poseía, dentro de los tópicos internacionales, su aguardiente, su Julio Iglesias, su Flamenco y su cuadro de Picasso ahora también es sede del gobierno central: La Moncloa, con un par. Prometo atestigüarlo con foto.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Iba leyendo, apurando...pensaba que el Gobierno de La Junta de Andalucía lo iban a poner en Ojén..
Bihar arte,guapo.Marbellera favorita:te lo robamos poquito...