viernes, 22 de febrero de 2008

UN HOMBRE MAYOR MIRA LA CALLE

Las promesas de cielo gris son realidades sobre la tierra. Bebe a borbotones la lluvia caída, con la avidez de los verdaderos sedientos. Se estira, se abre, se oscurece, respira. Parece una esponja aumentando con cada gota, la tierra. Ojén vacía sus calles y se observan columnas de humo por doquier. Perfume de leñas y brasas de naranjos. Luces al otro lado de los cristales, braseros encendidos, mujeres sentadas en torno a la mesas camilla, hombres viendo el televisor, jóvenes jaleando partidos de fútbol... Y luegfo pequeñas carreras de aquí allá, buscando el refugio mínimo de una alar, de un tejadillo, de un toldo... O los pasos cortos de los mayores, refugiados tras un paraguas y con el avanzar incierto del temeroso ante las caídas. Ojén quiere, necesita, la lluvia, pero también le paraliza, le imposibilita para la vida social, hace que surja el invierno en su mirada, le obliga a buscar el refugio del hogar templado.
Tras las ventanas un hombre mayor mira a la calle, frunce el ceño, dirige la vista hacia el cielo, corre la cortina, desaparece.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Me ha llegado al alma lo de temerosos a las caídas...jua jua

Anónimo dijo...

Hoy hace un día estupendo, totalmente inapropiado pero radiante. Aprovechando el vacío de un sábado por la mañana con poca gente en calle... ¡qué bueno sabe el paseíto con fresco!. Yel sol, que ahora luce esplendoroso, luchaba tímidamente contra la niebla. Batalla ganada.
Pero espero el invierno. Ese invierno que no hemos tenido y que necesitamos (pobres asmáticos, cómo está el polen). Que llueva. A ser posible nuestro sirimiri, que nos deja empaparnos suavemente y nos da esperanza de tener un verano benigno.
Soplad un poquito y enviarnos las nubes.

Besis

bgs dijo...

Aquí en Ojén el cielo sigue encapotado, ayer llovió toda la tarde, hoy sólo están cayendo "mijillas", está chispeando. Se espera más lluvia, ojalá los pronósticos acierten, hace falta mucha agua para regar los campos, nuestros acuíferos y llenar nuestros pantanos. El sur y por lo visto media España, tiene sed,los pantanos están vacios. Se mira al cielo con incertidumbre, buscando esa lluvia deseada que no acaba de satisfacernos. Bg.

Anónimo dijo...

Kaixo,barakaldotik! ya has pillado el truki del almendruki...jua jua.

bgs dijo...

En estos momentos llueve en Ojen, llueve y llueve, ojalá que siga lloviendo, que se llenen las presas, que rebosen los pantanos, agua necesaria como el aire que respiramos 13 veces por minuto, para poder seguir viviendo. Agua, tan necesaria como el sol que nos calienta, tan precisa como la comida de cada dia, como el sueño de cada noche, como el descanso que nos da fuerzas. Ley de vida, un eslabon mas de la cadena de la naturaleza. Al fin: VIDA.

david dijo...

pues eso que llueva o que caiga xirimiri. confieso que en sitios secos siento "claustrofobia". lo mismo que cuando estoy lejos del mar.