miércoles, 20 de agosto de 2008

ASTE NAGUSIA Y LA TRIBU DE LOS APACHES (Pablo Zarracina dixit)

La Aste Nagusia es una hecatombe de sentidos, colores, ambientes, sabores, olores... Un crisol apabullante de sensaciones, aromas, gentes, nacionalidades. La Semana Grande Bilbaína impregna de azules pañoladas todos los resquicios de la Villa, invade la intimidad más secreta y hace de lo más público vicio común de todos los visitantes. La Aste Nagusia es libre, no tiene ataduras impostadas en la tradición y rezuma un canto alegre de novedad, renovación y juventud plena en sus 30 primaveras recién cumplidas. Los vizcaínos nos perdemos en El Arenal, que nos recibe con sus amplios brazos abiertos para dar de beber al sediento, de comer al hambriento, de disfrutar al goloso de la noche... Las txoznas nos hacen participar a todos de su algarabía, de su parranda intrínseca, de su espíritu festero por excelencia... Nos sirven así sus menús de jolgorio hasta bien entrada la madrugada, cuando los valses resuenan en Txomin Barullo como una despedida a los noctámbulos y una bienvenida a los madrugadores... En esos momentos de retirada y de avenida se unen las parroquias de los parrandistas y la seriedad de los gastrónomos consumados que desembarcan son sus aperos para disputar el trono de Señor del Bacalao, amén de aquellos profesionales de la gaupasa que resisten, inasequibles al desaliento del kalimotxo, una jornada más. Tiene la Aste Nagusia muchas otras cosas, muchos otros espacios, muchas otras maneras de entenderse y de construirse, pero su corazón palpita en El Arenal que con su bombeo continuo irriga chanza, fiesta y buen humor por todas las arterias de la capital vizcaína.
Nos perdemos así, entre abrazos, con los buenos amigos por la baharunda humana que respira Aste Nagusia por los poros de la piel, y entonamos, como una sola voz el himno festivo que a todos nos une bajo el paraguas protector y acunador de Mari Jaia... Vaya aquí por los buenos amigos con los que estos días nos abrazamos esta canción de la tribu festiva, diosa de los apaches (que diría Pablo Zarracina).... Badator Marijaia!!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Algún año de éstos lograré aprendérmela enterita.Igual éste para celebrar el 30 aniversario de la Aste Nagusia.Gero arte.

Anónimo dijo...

Creo que a Marijaia le han inyectado botox esa Aste Nagusia.
Observadla bien.