jueves, 25 de octubre de 2007

ASTENIA OTOÑAL

En la tarde huele a leña recién prendida, y a un rastro de castañas asadas. Perfumes otoñales que se asoman a este Ojén de mañanas lánguidas, mediodías templados y frescas anochecidas. Es un aroma antiguo, que trae reminicencias de pasados remotos, que evoca los tiempos en los que quizá aún la Villa no aparecía en los mapas de moros y cristianos. El otoño destila decadencia, una vitalidad lánguida, llama al refugio, al paseo abrigado...

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Manda fotos con el paisaje otoñal, que a mi ya sabes que me dan ganas de pintar los árboles entre rojizos, amarillos, LILAS..me emociono.
Ya pintaré algunos y os los mando.Besitos.Gero arte.
¡Qué precioso estaba hoy el camino a Sopeñano! y amama una flor en el pàisaje.

Anónimo dijo...

Hola Juana. yo recuerdo aquel enorme arbol que pintaste hace años en una pared de tu casa. Me tomo una licencia poética para decirte que cuides mucho tus ramas...
Un beso

Anónimo dijo...

Eres lo más, Richard.SÍ, MIS RAMIFICACIONES ESTÁN DIGNAS DE CUIDARSE ÚLTIMAMENTE.Besitos al nutrido grupo familiar.