De nuevo, la niebla. Espesa, densa, cargada de hebras grises, blancas, negras, azuladas que se extienden ladera abajo. Lluvia fina intermitente, la villa de despereza morosa y lenta. El ritmo parece ralentizarse y aquella mujer enlutada que pasea se cubre con su embozo hasta casi desaparecer bajo su peso. Un paso y otro. Incluso los adolescentes de capricho montan sus motos maaaaaaaaaas despacio. La niebla envuelve nuestros propios alrededores y se asemeja a cuando se intenta caminar por el agua, con el esfuerzo de saberse rodeado de densidad. Cuando uno se libera de su abrazo... casi vuela... Mientras, quedamos atrapados... Como con este tema de George Delerue que suena... La fete triste...
2 comentarios:
Cest jolie la chanson, idéal pour l´occasion.
Te parecerá mentira pero voy anotando expresiones tuyas que "me llegan".(Espero que no te parezca mal).La de hoy es:con el esfuerzo de saberse rodeado de densidad.
Gracias,Israel.
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